En Lo Real, James aborda uno de sus temas recurrentes: la reflexión sobre los mecanismos creativos y la función del arte en nuestras vidas. Una pareja de aristócratas, los Monarch, entran en contacto con un artista de segundo nivel, un ilustrador de libros populares. La anécdota permite a James componer un cuento moral y una parábola estética. La acción simboliza una inversión en las jerarquías sociales y ejemplifica una profunda convicción de James: el arte imitativo, siendo de rango inferior, debe inclinarse ante su superior, la representación imaginativa.